Nadie es un genio a la hora de vestirse. Yo siempre tomo referentes a la hora de armar mis coords. Siempre son referentes muy distintos entre sí y nunca -en serio que nunca- mis outfit quedan como yo pensaba.
En esa foto, si no me equivoco, estaba viendo mucho Game of Thrones y quería usar un zorrito con cabeza en el cuello. No encontré uno como el que yo quería -mentira, encontré uno de zorros reales ultra caro y con esos ojos del terror-, así que compré un abrigo forrado en piel sintética. Lo desarmé, lavé la no-piel e hice ese cuello que va superpuesto en la chaqueta. ¿Tuve lo que quería? No, pero funciona.
En esta segunda foto, el referente era Karl Lagerfeld -sí, así de sin vergüenza-. Por la semana de la moda, terminé viendo fotos de Karl y me fijé mucho en su forma de usar los accesorios. Lo que quería era usar muchos collares largos, que ese fuera el centro. No tenía muchas opciones, porque se me ocurrió de un día para otro y tuve que usar solo un collar de puntas. Funciona.
Siempre, hay que mantener tu propio estilo, incluso cuando te inspiras en alguien más. Yo siempre uso detalles plateados o dorados sobre negro y la ropa ajustada, porque funciona para mi. Así no se transforma en un disfraz y deberías agregarle una calabaza para pedir dulces en Halloween.
Es bueno buscar inspiración en lugares diferentes. En las series que ves, en personajes, en ilustraciones o incluso animé (sí, dije animé). ¡No hay solo vampiros, soldados y piratas!
*Reciclando fotos, así se llama esto. Necesito una sesión.